Personas decentes, o las dos Habanas
Seré breve: este libro es una joya. En realidad dos joyas, porque son dos novelas en una. Dos crímenes y dos investigadores separados por más de un siglo: por un lado el inefable expolicía Mario Conde investigando la muerte de un exdirigente del régimen cubano durante la visita de Obama a La Habana en 2016; y por otra parte, el teniente Saborit persiguiendo al asesino de una prostituta en 1910, mientras se deja encandilar por un proxeneta que se va a adueñando de la ciudad.
Son, como digo, dos casos policiacos, entretenidos e intrigantes, y sin embargo los crímenes y la investigación parecen lo de menos, y es que ambas historias son solo una excusa para que Leonardo Padura nos muestre dos Habanas, con sus calles, su paisanaje, su vida política y su vida costumbrista en los más bajos y altos fondos.
Lo paradójico es que lo que más diferencia a estas dos ciudades, que son la misma, no es el paso del tiempo sino el cambio de percepción. Es el contraste entre la Cuba floreciente y la que ya no puede con su alma. De las ilusiones de nueva nación de principios de siglo XX, cuando La Habana aspiraba a todo aunque quedara mucho por hacer, al desengaño del siglo XXI cuando ya nadie cree que algo pueda cambiar para mejor, o al menos no para las personas decentes.
Una ciudad que soñó con ser la Niza de América y empezaba a parecerse a la Beirut bombardeada.
Hay libros que me gustan por lo que cuentan y otros que me atraen por cómo lo cuentan, y cuando coinciden las dos cosas, como en Personas decentes hay que guardar el libro entre los favoritos.
… Conde veía pulular ancianos con zapatillas gastadas y miradas mustias, en busca de los míseros sustentos alcanzables con sus jubilaciones, cada vez más menguadas por los precios de estratosfera que iba alcanzando la vida. Mujeres de gorduras falsas, hechas de harina y arroz con frijoles, enfundadas en licras que apenas atrapaban sus masas fofas pletóricas de colesterol del malo, en empecinada persecución del pan de cada día. Jóvenes con pelados estrafalarios, miradas iracundas, gestos exagerados de reguetoneros que vivían de lo que apareciese… Los incontables habitantes de la ciudad que no habían alcanzado turno en la cola de los sueños.
Título: Personas decentes |
Autor: Leonardo Padura |
Editorial: Tusquets |
Colección: Andanzas |
Páginas: 439 |
Fecha: 2022 |
Recomendado: Para los amantes del género policiaco «diferente». Para los que les gusta las prosa florida latinoamericana, y para amantes de la literatura en general. |